Ir al contenido principal

Las Columnas del templo de Salomón

Todos conocemos la historia de David, un joven judío, que hace 3000 años en tiempos del Saul (primer Rey de Israel) venció a Goliat, un gigante de 3 metros con espada y armadura poseyendo sólo una honda con 5 piedras que recogió del piso y su fe en JHWH. 

Años mas tarde, convertido en Rey guerrero y con una buena política de alianzas conquistó un gran territorio, afianzó la monarquía, se asentó en Jerusalén en la cima del monte Moriah.

En el Israel antiguo se decia que la tierra de Israel estaba en el ombligo del mundo y Jerusalén en el centro de la tierra de Israel, el santuario en el centro de Jerusalén y el Santo de los Santos en el centro del santuario, el Arca en el centro del santuario y la piedra fundacional frente al Arca de la Alianza, que era un cofre especialmente diseñado para guardar las Tablas de la Ley de Moisés y era el símbolo de la alianza entre JHWH y su pueblo elegido.

El pueblo judío transformó así su vida nómade en sedentaria, y construyó un templo de piedra para sustituir el Tabernáculo que era un santuario itinerante de postes de madera y telas, que albergaba el Arca de la Alianza que los había acompañado cuando vagaban por el desierto desde el Éxodo de Moisés y durante siglos había sido utilizado como lugar de culto y reunión.

Los hebreos necesitaban los símbolos de un Dios que les había prometido esa tierra para toda su descendencia quedando la circuncisión como señal del pacto, cuando en ese lugar y mil años antes tuvo lugar el sacrificio no consumado de Isaac por parte de Abraham. 

Para ello querían levantar un templo donde ese Dios pudiera ser honrado, habían creado una casta sacerdotal, especialmente instruida para atenderlo. Es interesante que no bastaba con construir el templo para honrar a Dios. Dios tenia que aceptar el lugar. Debía reconocer a ese lugar como sitio de homenajes.

Al Rey David lo sucedió su hijo Salomón quien, en el marco de la construcción de "su gran palacio", decidió anexar una capilla privada de soberano para albergar el Arca, pero la teología posterior introdujo la idea de un santuario único y la Biblia lo presenta como el único templo legítimo del reino.

Salomón amplió el Templo edificado en el estilo de los santuarios cananeos, bajo la dirección de Hiram Abif un broncista fenicio, con el apoyo del rey Hiram de Tiro

Desde tiempos remotos, antes de la construcción del templo de Salomón, la entrada de los lugares sagrados han sido custodiados por dos pilares, ya que representan una importante puerta de entrada o paso hacia lo desconocido. 

También era típico de la arquitectura fenicia tener columnas independientes y decorativas. Eran imitaciones de las grandes columnas de oro macizo, consagradas al viento y fuego, que se encontraban en la ciudad de Tiro a la entrada del templo de Melkart (figuración primitiva de Hércules).

 



Templo de Hércules




Templo de Salomón
 

Algunos creen que las columnas tenian grabadas en sus paredes información importante, otros especulaban que eran un depósito, pero si este fuera el objetivo principal, hubiera podido cumplirse con simples cajones y además, no precisamente a la entrada del Templo. 

El Templo de Salomón no era un lugar abierto a todo el pueblo sino a un grupo limitado de personas, estaba dentro de “su palacio”. 

La instalación de las dos columnas de bronce fundido a la entrada del templo marcaban la frontera con el mundo profano de modo que, aquellos pocos que luego de entrar a su palacio, podían penetrar en el templo realizaban un auténtico rito de transición al pasar de la oscuridad a la luz, pues por el Oriente penetraba la luz que irradiaba el templo en donde se encontraba el Arca de la Alianza. 


Esto es así pues, el Templo de Salomón como los templos de la antigüedad, estaba orientado de acuerdo a los puntos cardinales. 


Cabe destacar que, al igual que los egipcios, se creía que el Templo era el recinto donde vivía la Divinidad y es por eso que había una columna de humo permanente que simbolizaba su presencia.

Las 2 columnas del Templo del Rey Salomón, al igual que en los antiguos templos, estaban ubicadas afuera del templo, en la entrada, son "vestibulares", no eran “portantes”, no sostenían nada, no tenían utilidad práctica evidente, las columnas eran huecas, de bronce. 

Otros como Michael Rood creen que las columnas del Templo eran un engaño con el fin de resguardar el Arca de la Alianza que era la pieza mas importante, y la clave de su funcionamiento habría estado en el uso de palancas hidráulicas y sus columnas llenas de arena, para esconder rápidamente el Arca de la Alianza que se encontraba dentro del recinto.

En el primer libro de Reyes, se dice: “Estas columnas erigió en el pórtico del templo; y cuando hubo alzado la columna del lado derecho, le puso por nombre Jakim, y alzado la columna del lado izquierdo, llamó su nombre Boaz”

Algunos suponen que los nombres, surgen de las dos primeras palabras de dos líneas provenientes de los salmos del rey David y simbolizan las promesas dadas por Dios sobre su dinastía: “Jehová establecerá tu trono para siempre, en la fortaleza de Jehová se regocijara el rey”. 

Aunque quizá haya sido el espíritu de las palabras, no es la impresión que dan los textos bíblicos que simplemente citan los nombres de las columnas como si hubieran sido nombres personales.

La columna de la Izquierda dedicada a Boaz, es consagrada sin duda al bisabuelo de David, quien había sido Juez en la época en que los Jueces gobernaban al pueblo de Israel.

Dado que la columna de la izquierda es una ofrenda a la sucesión de la familia real de la casa de David (que desplazaba a la de Benjamín), es muy probable que la de la derecha este consagrada a la familia Sacerdotal a cargo del servicio del Templo ya que Jakim era el nombre del sacerdote que ofició su consagración. 

Podemos conjeturar que las columnas hayan sido emplazadas para señalar que: ese límite entre el mundo profano y el celestial, estaba enmarcado por la línea monárquica sucesoria de los descendientes de Boaz (David/Salomón) y la Sacerdotal de Jakim

Cabe destacar que solo transponían estas columnas, a través de una gran puerta enchapada en oro, el Rey y los sacerdotes, pues era una capilla privada, a diferencia del Tabernáculo de David  al que podían ingresar los fieles. 

No hay que olvidar es que el Templo de Jerusalén no fue, propiamente, un lugar de culto y, por lo tanto, de concentración de los fieles, que lo hacen en el atrio y fuera de lo que específicamente es Templo, sino la morada del Arca de la Alianza.

El Templo de Salomón es, propiamente, el conjunto de tres piezas: el Atrio, el Santo y el Santo de los Santos. Luego de pasar la puerta enchapada en oro, se encontraba el vestíbulo de entrada (Atrio) y luego la habitación principal (Santo) cuyas paredes se cubrieron con láminas de cedro. 

La tercera cámara (Santo de los Santos), de forma de un cubo, se encontraba a un nivel más alto en la parte trasera, y sólo podía accederse a él subiendo por una escalera. En su centro se ubicó el Arca de la Alianza flanqueada por 2 enormes querubines de madera. 

Éste era un arcón grande, hecho de madera de acacia, cubierta con planchas de oro y con cuatro anillas a las esquinas en las que se ponían varas para transportarla. Dentro del Arca se preservaban las Tablas de la Ley de Moisés, donde estaban grabados los Diez Mandamientos, una porción de Maná y la vara de Aharon.

Especulando sobre los motivos que pueden haber influido en la construcción del templo, las victorias militares, y la política de alianzas que forjó David expandieron el territorio y con el nacimiento de la incipiente monarquía, requirieron afianzar el trono obtenido para sus descendientes y los de Salomón. 

Era necesario dejar sentado, mediante la construcción de un obelisco llamativo, como lo eran esas columnas gigantes, la alianza con Dios a través de la casta Sacerdotal de los kohanim y la Real de la línea de David, inscribiendo las iniciales de los antepasados. 

Cabe recordar que el primer Rey fue Saúl que era de la tribu de Benjamín y luego de su muerte todas las tribus, excepto de la de Judá permanecieron leales a la casa de Saúl, pero después de la muerte su hijo y sucesor del trono de Israel, la tribu de Benjamín se unió David rey de Judá, junto al resto de las tribus de Israel Era entonces muy importante dejar establecida la línea sucesoria.

Estas columnas de bronce fundido no habían formado parte del Tabernáculo en la época en que este albergaba el Arca de la Alianza y el pueblo de Israel llevaba una vida nómade. 

Tampoco podrían haberlo estado por su peso, pues dado el tamaño y el espesor, las mismas pesarían alrededor de 30 Ton cada una, tampoco se levantaron esas columnas de bronce en el segundo, Templo, construido posteriormente. 

Fundir las mismas, al igual que el mar de bronce, representó un desafío tecnológico para la época, lo que requirió la contratación de un extranjero experto en fundición como Hiram de Tiro quien poseía el conocimiento para hacer toda suerte de obras de bronce, descendiente de Caín.

La leyenda de la fundición de las columnas de bronce

Estas columnas eran enormes y pesadas para la época. Tenían una altura de 18 codos (8.1 mts) y dos metros y medio de diámetro. Los capiteles de bronce que estaban sobre los pilares en el pórtico, median mas de 2 metros y tenían forma de lirios y doscientas granadas en dos hileras alrededor en cada capitel.


Cuenta la leyenda recogida por Gérard de Nerval, que Hiram el Fundidor, había realizado el molde para una escultura de bronce y debía producir el “vaciado” en presencia del propio Salomón y, de Balkis, reina de Saba, pero los traidores, que siempre surgen en estos casos, sabotearon la obra de manera que cuando se produjo el “vaciado” se rompió el molde, y muchos se quemaron con el bronce ardiente. 

Una vez acabada la tragedia y en medio de la humareda surge un fantasmagórico personaje, Tubal Caín, que le transmite a Hiram el “secreto” de la tradición luciferina, que es la que altera profundamente nuestra interpretación cristiana del trabajo.

El “secreto” es la existencia de dos dioses: Adonai (que creó al primer hombre, Adán, para que fuera su esclavo y juguete) e Iblis (que, compadeciéndose de la criatura, le proporcionó la inteligencia y la compresión). 

Caín se convierte en ese momento en el “santo patrono” de los trabajadores, explicándole a Hiram que todos sus descendientes trabajarán sin cesar para mejorar la suerte de los hombres. La compensación por ello, será que, secretamente, engendrará en la famosa Reina de Saba y este hijo será continuador (uno de los hijos de la viuda) de la defensa de los humanos, ya que Hiram será asesinado en plena edificación del Templo. Moraleja: los “signos” que rigen inconscientemente nuestra forma de entender el mundo, pueden explicarse de muchas maneras. Los “buenos” no lo son y los “malos” suelen tener sus explicaciones para serlo. 

 

Significados de las dos columnas

La duda es para qué el Rey Salomón levantó estas dos columnas a la entrada de su Templo. ¿Eran solamente elementos decorativos?, seguramente no, puesto que simbólicamente reflejaban que había un pacto entre el cielo y la tierra. Ellos permitían ingresar a la puerta que conduce a la Casa de Dios.

Una de los símbolos egipcios más importantes fruto del pacto entre el cielo y la tierra es la imagen del árbol de la vida, como manifestación material de las fuerzas de generación y renovación que representan la esencia de la vida. 

Este símbolo fue utilizado por muchas culturas y con el paso del tiempo el hombre reemplazó el original vegetal por una representación pétrea, menos corruptible y comenzaron por adorar pequeñas pirámides que se colocaron a ambos lados de las entradas de los templos denominadas obeliscos, los que se erigían por parejas y servían mágicamente como protección. 

Es lógico pensar que las columnas a la entrada del templo se utilizaron para proteger el Templo donde Jehová tendría su morada.

Cuando estas 2 columnas espirituales están en su lugar, se logra la armonía y se forma un arco que une ambas columnas, como si fuera una piedra angular que los egipcios lo denominaban Maat y los judíos lo denominaron Shalom. 

Este término judío que muchos lo interpretan como un saludo, significa mucho más que paz y armonía. Es el gran objetivo a cumplir y no se da por casualidad. No es un regalo gratuito, sino que hay que ganárselo mediante un gobierno de Jehová, siguiendo un orden moral respaldado tanto por la columna real y la sacerdotal. En las enseñanzas cabalísticas, Jakim y Boaz representan los dos pilares de Sepiroth.


  

El acto de “atravesar” o “pasar por pilares”, representa simbólicamente la transformación. Las columnas constituyen un portal firmemente establecido que nos separa de lo desconocido. En la antigua Grecia, se llamaban las Columnas de Hércules las colinas que flanquean la entrada del Estrecho de Gibraltar. 

La tradición nos dice que los pilares llevaron la advertencia "non plus ultra" (nada más), que sirvió como una advertencia a los navegantes, para no seguir avanzando. Simbólicamente, más allá de las Columnas de Hércules podría significar el abandono del mundo material para llegar a un reino superior de iluminación.


Las columnas y la desaparición del Arca de la Alianza

Quinientos años después de la construcción del templo, en el 586 a.C. los babilonios, comandados por el rey Nabucodonosor II invadieron Jerusalén, llevaron cautivos una gran parte de los habitantes del Reino de Judá hacia tierras caldeas, y se llevaron absolutamente todo lo que encontraron, de los valiosos tesoros quedo registrado que se robaron el Candelabro de Siete Brazos, llamado por los judíos menorah, y la Mesa o Espejo de Salomón. 

Pero ¿por qué no se dice que se llevaron el Arca de la Alianza, si también se hallaba en Templo?. Simplemente porque no la encontraron.

Existen indicios que nos hacen pensar que el Arca de la Alianza, fue escondida por los hebreos en un refugio previsto en caso de extrema necesidad. El sabio árabe Maimónides cita la existencia de una cueva secreta bajo el primer Templo. 

Esta gruta, muy profunda, habría sido construida por mandato del propio Salomón, quién pronosticando una futura destrucción del Templo, decidió proveer de un escondite seguro para el Arca.

Según Michael Rood había sido sacada por un pasadizo secreto que funcionaba con una palanca desde sus columnas.

Cuando los babilonios midieron las columnas en el pórtico, éstas medían los dieciocho codos de altura, pero los capiteles sobre ellas no medían los cinco codos originales. Pero cuando las sacaron para llevárselas, median los cinco codos originales:

 



Cuándo se mira el Templo desde uno de sus lados se puede comprender el secreto del Templo de Salomón. Cuando la arena dentro de las columnas se liberaba, el peso del capitel ejercía peso hacia abajo para que un extremo de la palanca fuera hacia abajo y el otro extremo por la otra parte subiera. Con ella también subiría un sistema de elevador con una cámara secreta donde los sacerdotes ocultaron el Arca del Pacto antes que los babilonios destruyeron el Templo.

 








 

El Arca de la Alianza el Arca viajó con los hebreos por el desierto en tiempos de Moisés, cruzó el Jordán y entro en Palestina bajo la dirección de Josué y en tiempos de Samuel fue robada por los Filisteos. Espantados los Filisteos por los poderes del Arca, que provoca muertes y enfermedades, se la devolvieron a los israelitas, y el Rey David la lleva a Jerusalén donde su hijo Salomón la coloca en el sancta sanctórum del Templo hasta su destrucción. 

Después de esto, ninguna mención en los libros históricos, solamente leyendas, porque los Persas no la encontraron y es muy probable que los Israelíes la hayan escondido y sólo muy pocos han sabido su paradero, teniendo en cuenta lo dicho por Salomón: “Yahvé, has dicho que habitarías en la oscuridad. Yo he edificado una casa para que sea tu morada, en lugar de tu habitación para siempre” (Libro de los Reyes: I, 8-12, 13)..

Nunca sabremos todos los secretos ocultos en esas columnas.

 

Bibliografía:

eltiempodegracia.blogspot.com.ar

Entradas populares de este blog

La Acacia

La acacia es un árbol muy común en la Península del Sinaí, cerca del río Jordán, por lo que en tiempos bíblicos esta zona se elegirá un bosque sagrado para los hebreos. La madera de la acacia fue utilizada para la elaboración de objetos religiosos con un significado especial, como el Tabernáculo, el Arca de la Alianza, la mesa para el pan de las proposiciones y otros muebles sagrados, incluyendo los cuernos del altar, tal como se menciona en el Éxodo 25-27.   Al igual que la rama de olivo es reconocida como símbolo de la paz, la rama de laurel como símbolo de la victoria y la rama de romero como símbolo de la memoria, la rama de acacia se presenta como un símbolo de la inmortalidad del alma. Esto se debe a su naturaleza siempre verde e inmutable, así como a su madera incorruptible e inalterable.   Se cuenta que una rama de acacia colocada sobre la sepultura de Hiram en el monte Moriah fue la señal que no se pudo localizar su tu

SALMO 133

¡Qué lindo que es poder compartir en armonía con los hermanos! Así comienza el Salmo 133, que es el pasaje donde normalmente se abre la Biblia en la apertura de los trabajos en la logia. No es obligatorio utilizar la Biblia en las tenidas, ni abrirla en ese Salmo, pero creo que es el más representativo del trabajo que se realiza en una Logia. Habla de unidad, ¨ ver habitar en uno solo a los hermanos ¨. Somos un cuerpo, la logia, así como representación del universo es también manifestación del cuerpo humano. Cada uno tiene una función al igual que los órganos que lo componen. Si uno enferma, todos los demás se recienten. Es bello sabernos parte de un grupo y mejor aún, que ese grupo se cuida así mismo, crecer, para trabajar, para ser. En los antiguos linderos, conocidos como Landmarks, se establece que debe estar presente el libro que contenga la doctrina religiosa del lugar donde resida la Logia, lo que llevó a que el texto sagrado fuera no solo la Biblia sino también e

Boaz

El porque de una Palabra Sagrada

Las Herramientas del Maestro Masón

El trabajo específico del Maestro Masón en Cámara del Medio consiste en pulir su piedra bruta?.  Yo, creo que no. Si creo, que como eternos aprendices, debemos seguir puliendo nuestra piedra bruta, pero que no es esa la tarea específica y el motivo por el que estamos en esta cámara. Creo que no podemos, buscar nuestra comodidad y seguir trabajando como aprendices en el grado de Maestro cambiando simplemente los temas a tratar. Es decir aprender solamente las nuevas palabras, los nuevos signos, toques o leyendas y tratarlas como hacíamos en los otros grados. Todos conocemos las herramientas del Aprendiz y es probable que recordemos las del Compañero, pero nos cuenta identificar rápidamente las del Maestro y su utilidad. ¿Será porque estamos poco habituados a utilizarlas? Sabemos que las Herramientas del Aprendiz son herramientas de acción . El Aprendiz debe ceñirse estrictamente a las medidas de la Regla de 24 pulgadas y ha de trabajar con su mazo en pulir su piedra bruta.

EL OJO QUE TODO LO VE

👀  Ver en Videos  👀 El Ojo de la providencia, también llamado Ojo que todo lo ve, Panóptico o Delta luminoso, es (según Wikipedia) un símbolo interpretado como la vigilancia y providencia de Dios sobre la humanidad. Hoy en día simboliza el control y la dominación de la élite que dirige el planeta, pero su uso original tenía otros significados como vamos a ver. Se encuentra relacionado con el «Ojo de Horus» del antiguo Egipto. Sin embargo, se diferencia de él porque se encuentra inscripto dentro de un triángulo con uno de sus tres vértices hacia arriba y con la mirada hacia abajo, como símbolo de «omnipresencia». El símbolo ha sido usado tanto dentro de contextos religiosos, como mágicos y forma parte del simbolismo masónico donde es conocido como "Delta luminoso", por su semejanza a la letra griega Delta, el cual es representación del Gran Arquitecto del Universo. En muchas ocasiones tiene inscrito el tetragrama hebrero o solamente su primera letra hebrea &q